No quiero imaginarme cuántos pobres habrán sido triturados junto a "otros" desechos orgánicos. Cuántos pobres cadáveres se habrán convertido en anónimo festín para las gaviotas que ahora pululan, adquiriendo trazas de aves carroñeras, por los vertederos.
El gatito está sano y salvo. Lamentablemente no se pudo coger al sinvergüenza, como en este otro caso.
Esto no pasó aquí. Fue en Inglaterra, que también hay gente que se merece, como esta tipa
repugnante, que conforme echa a andar tras la fechoría se la pare en seco, de un modo que...
bueno, cada cual imaginad lo que más os satisfaga. Suben mucho las pulsaciones y la sangre
se calienta mucho cuando se ven estas imágenes. No pasó aquí y tuvo un buen castigo.
Cosa que no podemos decir por estos lares en que una multa siempre queda corta.Por eso la
sangre hierve aún más y al no confiarse en un buen y verdadero escarmiento, se solaza uno en
pensar mejor en el envío a una buena visita al dentista (ponen unos implantes de fábula).
Y que me entienda el que quiera entender. -Y el que no, que me tache de violenta, psch-.
de seguro, pasando ahora mismo. El culpable quedó impune (¡qué extrañeza!) y la galguita,
que sus salvadores llamaron Lola, fue salvada, atendida y refugiada y, según me cuenta quién
de ésto mejor y más seriamente sabe, felizmente adoptada.
Este animal es un ejemplo de lo que en medicina se denomina estado caquéxico.
Jonás en la actualidad. |
a unos pocos. Porque ya mayoría se limitó a solazarse con los polígrafos de famosos de tres
al cuarto o depilarse las cejas mientras escuchaban sus aullidos de agonía.
Es el caso de Esperanza.
basura más. Debía de llevar bastante tiempo sin comer ni beber y estaba a pleno sol.
Esquelética, rígida, fría y con múltiples heridas, parecía llevar muerta varios días, salvo
porque aún respiraba a duras penas. Se hizo cargo de ella Galgos 112. Y leimos:
de hacer algo así a un animal vivo. Parece mentira que individuos de esa calaña vivan
en nuestra misma ciudad y que nos crucemos con ellos por la calle como si fueran
personas normales. Tampoco entendemos a esas otras personas que la han estado
escuchando chillar pidiendo ayuda y no la han sacado de allí y que nos han
indicado el sitio tan tranquilamente diciéndonos que “el perro ya debía de estar
muerto porque ya no se escucha”.
Algunos reciclajes salen muy caros. Sobre todo en dolor, lágrimas, tesón, noches en vela,
dinero, empeño, unión, coraje, generosidad, voluntad y amor.
¿ Quién no ha visto alguna vez a alguien rebuscando en la basura por si logra topar con algo provechoso?
Brownie, en la actualidad felizmente adoptado |
Esta tierna y achocolatada basurilla, llamada Brownie procedía de ¡dos! camadas distintas
que se cocían en su propio jugo en pleno verano, en un contenedor metálico en la vereda de
un campo sin oportunidad ninguna de salvación, salvo un oído extraordinario y un más
extraordinario megacorazón.
Los desperdicios éstos tampoco era de todos, puesto que no todos pagamos con nuestras
tasas ni su manuntención, ni las vacunas y consultas veterinaria, ni sus pienso especial multiplicado
por cada pequeñajo, ni las idas y venidas, teléfono, gestiones y angustia. Estos cachorros estuvieron
en la casa de quien los encontró a costa de unas merecidas vacaciones (¿quién se marchaba a
visitar a los familiares con tanto huésped en casa reclamando biberón?¿qué hacer hasta que
tuvieran a alguien que los acogiera por lo menos?).
Así que España, visto lo visto, es un enorme basurero donde los miserables se deshacen de
sus residuos, con independencia de que éstos sean seres con vida, inocentes de todo que tienen
tanto derecho a respirar y a mamar de las tetas de su madre como nosotros mismos. Luego esos
bestiajos egoístas y despiadados (que igual les gusta sentirse poderosos pudiendo condenar lo que
está a su alcance) y que se largarán silbando sin mirar atrás luego pedirán derechos y respeto.
Dirán que merecen esta o cual atención. Exigirán a pleno pulmón y a diestro y siniestro. Cuando
la basura y no otro lugar es donde debieron permanecer hasta que sus entrañas se purificasen un
poco, sólo un poco. Siquiera hasta el punto de no ser cobardes verdugos campando a sus anchas.
En un basurero habría que dejarlos por ley, hasta cerciorarse de que vomitaban porque el hedor y la putrefacción les provocan la misma repugnancia que merecen sus actos.
Pero aquí parece que hasta el olfato lo tengamos atrofiado... quizá de tanta y tanta bazofia (que en el diccionario se define como "Mezcla de heces, sobras o desechos de comida". y "Cosa soez, sucia y despreciable".
Pero no es a eso a lo que iba cuando me disponía a comenzar esta entrada.
Este es un blog, eminentemente, de difusión. Aunque a veces no pueda evitar que se me salgan
las ganas de gritar a los cuatro vientos lo que en líneas anteriores me ha dejado ronca.
En realidad esta foto es lo que importa,
2 comentarios:
No me cansaré de repetirlo : SOBRAN SERES INHUMANOS. Pensándolo mejor, incluso la denominación de seres es inapropiada y les viene grande. Esos bípedos que obran tales fechorías merecen la ley del Talión. Ellos sí que forman parte de la escoria.
Esto tan dramático y que tan magistralmente describes, es algo que se está convirtiendo en una obsesión para mi. Continuamente me pregunto cuantas de estas criaturas estarán ahora ahí, dentro de esos contenedores y sin ser vistas ni salvadas por nadie. Es terrorífico que se hagan esas cosa, que exista gente que haga esas cosas y que no se escandalice nadie. ¿Que pasaría si se encontraran en contenedores de basura, repartidos por esta casposa España, bebés humanos, en lugar de gatillos o perritos? Se horrorizaría el país entero, se tomarían medidas, se investigaría y se perseguiría a los responsables, para ser condenados como parecería lo normal. Con las criaturas estas cuadrúpedas, nadie hace nada, salvo cuatro con corazón que parece que la providencia pone en su camino. Es tristísimo, cruel y muy injusto. Tan gentuza o bazofia, son los salvajes que arrojan criaturas a contenedores como las autoridades que no lo evitan ni persiguen.
Gran post, querida Arquepe.
Besos.
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