Citando la procedencia y con el permiso de la autora del magnífico blog perrosdecasa.blogspot inserto aquí esta secuencia de imágenes, pues me siento incapaz de no reproducir las instantáneas, como homenaje a ese chico anónimo y reconciliación con el género humano, que, por fortuna, está también plagado de exponentes increiblemente nobles y admirables.
El que pega un tiro o patea a un perro no tiene de hombre ni el nombre pero para hacer lo que este chaval sí hay que tenerlos bien, pero que muy bien puestos.
ResponderEliminarMadre mia, cuando ves cosas asi realmente empiezas a creen en el genero humano, pero por desgracia chicos como este hay tan pocos frente a tantisimos antianimales.
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